El alcalde pone en valor el funcionamiento y servicio que presta ‘El Recreo’, así como el apoyo y grado de satisfacción de las familias con este programa
El alcalde de Rota, José Javier Ruiz Arana, ha visitado junto con la delegada de Igualdad, Luisa Fernández, los tres centros donde se está desarrollando durante este verano ‘El Recreo’, un programa municipal especialmente diseñado para facilitar a las familias la posibilidad de conciliar la vida laboral y familiar durante los meses de vacaciones escolares de sus hijos, y atender con actividades de ocio a los menores.
El primer edil ha querido subrayar el buen funcionamiento que ha registrado ‘El Recreo’, la utilidad que tiene para las familias este servicio, y el nivel de satisfacción de las familias, algo que se refleja en la cantidad de usuarios que se benefician de este servicio que este verano ha alcanzado una cifra récord de 404 inscritos.
Por todo ello, Ruiz Arana ha puesto en valor y agradecido el trabajo de la Delegación de Igualdad, la delegada de Igualdad y el personal de ‘El Recreo’, desde la coordinadora a las 17 monitoras cualificadas entre las que se encuentran licenciadas en Magisterio, Grado de Educación Infantil, Técnicos de Integración Social, etc. que han estado y siguen al frente de este servicio que no es un servicio educativo reglado, “aunque los menores también aprendan además de divertirse”.
La evolución de este servicio, tal y como explicó el alcalde, ha pasado desde que comenzó en 2006 con 30 niños, a 120 en 2007, 170 en 2008, o 135 en 2009. Esta tendencia ascendente siguió consolidándose a partir de 2015 cuando el actual equipo de Gobierno decidió dar continuidad al servicio a pesar de no contar ya con la subvención del 50% que la Junta había dado al programa en años anteriores. Así, en 2015, el Recreo contó con 220 niños y niñas, en 2016 con 193, en 2017 con 279, en 2018 con 331, en 2019 con 363 y tras los dos años de paréntesis por la pandemia, en este 2022 con 404 inscritos.
En todos estos años, explicaba el alcalde, el Ayuntamiento ha ido adaptando el número de monitores al de participantes. Así, tras los 15 monitores que se contrataron en 2019 con 363 usuarios y en previsión de que la demanda aumentara este año, el Ayuntamiento contrató para este verano a un total de 17 monitores. Así, la ratio ha sido en torno a los 20, con variaciones en función del mes.
Por otro lado, el número de niños con necesidades especiales, y de los que las familias informaron a la Delegación, también ha ido aumentando, si bien este incremento ha sido muy lento en años anteriores, siendo en 2016 y 2017 de 2 niños y en 2019 de 7. No es esta este año cuando el número se dispara hasta los 24 niños, de los cuales 8 necesitaban de una mayor atención.
Con todo, tal y como indicó el alcalde, ante la importante subida en el número de niños con necesidades especiales, además de la subida general de inscritos, y a pesar de la previsión de aumento de dos monitores más contratados este año, la Delegación municipal de Igualdad actuó reorganizando el trabajo para que algunos de los monitores pudieran apoyar la atención a menores con necesidades especiales.
Y es que tal y como aclaró Ruiz Arana, contratar a más monitores para este mismo verano ya no resultaba viable teniendo en cuenta que los trámites para modificar las previsiones presupuestarias y gestionar las cuestiones burocráticas, hubiesen demorado estas contrataciones hasta más allá del final de verano.
Con todo el respeto a la madre que ha hecho pública sus quejas, a la que pidió disculpas, el primer edil quiso aclarar que hay cuestiones que no responden a la realidad, señalando que el Ayuntamiento ha atendido a todos los niños y niñas, las monitoras cuentan con las titulaciones y capacidades necesarias para atender a niños con necesidades especiales, el servicio ha sido sensible a la hora de facilitar entrada y salida de los niños para acudir por ejemplo a atención temprana, se reorganizó el servicio para que hubiera monitores de apoyo para estos niños, se cambiaron los pañales y se atendió a todos estos niños; y no se ha pedido material especial a los padres ni se les ha exigido que acompañaran a los niños en las salidas, entre otras cuestiones.
Así pues, el alcalde quiso insistir en que más allá de cuestiones puntuales que se trabajará para solucionar de cara a futuras ediciones, el servicio se ha desarrollado de manera muy positiva y con un alto nivel de participación y satisfacción entre las familias y los menores.