Daniel Manrique asegura que la situación de los chiringuitos está regularizada y que el equipo de Gobierno ha atendido las demandas del colectivo
El teniente de alcalde delegado de Régimen Interior y Contratación, Daniel Manrique de Lara, ha querido responder a la noticia emitida por el PP sobre los chiringuitos, para aclarar que la situación de los chiringuitos de Rota es totalmente regular y que todos ellos cuentan con un contrato en vigor.
Para el delegado "estas declaraciones están fuera de lugar", ya que dejan entrever, tal y como han trasladado al Gobierno municipal algunos de los titulares de concesiones, que los chiringuitos están en una situación irregular, y "esto es algo que tenemos que desmentir de manera categórica", indicaba el delegado.
Además, Manrique ha explicado que cuando el actual equipo de Gobierno llegó al Ayuntamiento se reunió con los titulares para atender la demanda de los titulares. Algo que se ha hecho con medidas concretas que están ya incluidas en los pliegos de condiciones con los que ya se han adjudicado chiringuitos.
No obstante, y tal y como especificó el delegado, no todos los chiringuitos pueden disfrutar a día de hoy de las ventajas que suponen estas nuevas condiciones, ya que los contratos de la mayoría de los chiringuitos están basados en el pliego elaborado por anteriores equipos de Gobierno, de manera que sólo dos contratos firmados en esta legislatura se basan en el nuevo pliego.
De hecho, tal y como indicó Daniel Manrique indicó en el inicio de la legislatura, en verano de 2015, muchos de esos chiringuitos tenían contrato en vigor, y otros aún se estaban licitando por lo que "lo único que pudimos hacer fue concluir con el proceso para darles la concesión, y adjudicarlos en base al pliego de condiciones elaborado por el anterior gobierno de PP y RRUU".
Fue a partir de entonces, cuando se comenzó a cambiar los pliegos de condiciones atendiendo todas las demandas del colectivo de los concesionarios. Estas modificaciones permiten aumentar el plazo de concesión de cuatro años y una prórroga de dos más, a diez años con una prórroga de cinco años más, algo que va a permitir que los concesionarios puedan hacer una inversión más potente y puedan ofrecer un mejor servicio al usuario; ampliar la temporada en la que pueden estar abiertos, de manera que en vez de poder estar hasta octubre, ahora pueden estar operativos todo el año, siempre y cuando obtengan la autorización que no depende del Ayuntamiento, sino de Medio Ambiente.
Las modificaciones de los pliegos van más allá e incluyen también un aumento sobre el espacio de ocupación, pasando de los anteriores 150 metros cuadrados a los actuales 300 m2, lo que "supone un espacio mayor para ejercer la actividad, y repercute en la creación de empleo".
Además, también se ha eliminado una cláusula abusiva que obligaba a los titulares a comprar el chiringuito y devolverlo al Ayuntamiento cuando terminaba el plazo de explotación, de manera que ahora tan sólo se les obliga a comprarlo.
Con estas nuevas condiciones se han adjudicado ya el chiringuito de la bajada de Punta Candor y el de la playa de Puntalillo. Así, esta nueva normativa se irá aplicando en el resto cuando vayan venciendo los contratos de los chiringuitos que existen en la localidad: en Galeones, la playa del Rompidillo, la bajada de la Costilla, Santa Marta, Virgen del Mar, en la playa del Puntalillo entre Virgen del Mar y el Hotel Playa, dos en Punta Candor uno en la playa y otro en la bajada principal, y otro en Pueblo Marinero en Costa Ballena.
La única excepción se centra en el chiringuito de la zona del Balneario, que no se monta desde el 2015, porque la situación se ha enquistado. Tal y como explicaba Manrique, el anterior equipo de Gobierno adjudicó la concesión de este chiringuito en 2013, pero el titular no presentó la garantía necesaria para completar el proceso, y por tanto se propuso al segundo licitador. Con todo, el procedimiento no siguió su curso y en 2014 se propuso de nuevo la concesión al primer licitador, firmándose el contrato con este titular que un año más tarde renunció al contrato, bloqueando así la situación de este chiringuito, que probablemente termine derivando en un contencioso. Y es que el segundo licitador defiende que el contrato no debía haberse firmado con el primero, y los servicios jurídicos del Ayuntamiento entienden que si se firmó el contrato, se debe comenzar un nuevo proceso de adjudicación.
Por otro lado, el delegado también recordó que además de mejorar las condiciones del pliego de condiciones, este equipo de Gobierno ha regularizado el pago de los dos cánones que los titulares de las concesiones de los chiringutos deben abonar: un canon que pagan al Ayuntamiento, y otro que exige el Ministerio de Medio Ambiente a partir de 2013, peo que no se reclamó por parte del gobierno de PP y RRUU a los concesionarios, que habían acumulado así una deuda conjunta de 172.000 euros. Ante esta situación, el actual Gobierno municipal se sentó con los titulares para llegar a un acuerdo y fraccionar el pago, que se está regularizando
Por todo ello, para Manrique el PP “no puede pedirnos que regularicemos la situación de los chiringuitos, cuando todos están en una situación regular”, señalando además que desde el Ayuntamiento se ha atendido todas las demandas de los titulares de las concesiones.